editorial

El legado de Mario Bunge

Las Universidades públicas argentinas, pese a las restricciones económicas y políticas sufridas, han ofrecido a nuestra sociedad y al mundo la formación de notables estudiosos en las más variadas disciplinas.
     
Tal es el caso de Mario Bunge, quien al concluir recientemente en Montreal su centenaria vida se había convertido en uno de los científicos y filósofos de habla hispana más citado del mundo. Sus más de cien libros y centenares de artículos le valieron premios y distinciones honoris causa y profesorados honorarios de universidades tanto americanas como europeas.
   
Nacido el 21 de septiembre de 1919 en Buenos Aires, estudió física en la Universidad Nacional de La Plata y ya a sus 19 años, como modo de retribuir al pueblo que pagaba sus estudios, fundó la Universidad Obrera Argentina que alcanzó a funcionar seis años hasta ser clausurada por el gobierno militar surgido del golpe revolucionario de 1943.
   
Su afición por la filosofía le llevó a impulsar la revista “Minerva”, juvenil esfuerzo que mucho después culminó en sus famosos ocho tomos del “Tratado de filosofía básica”, ya ejerciendo la docencia en la Universidad McGill, de Canadá, país donde vivió junto a su esposa durante más de medio siglo.
   
La que ha sido calificada como “monumental obra intelectual” fue producto de un trabajo diario de siete horas todos los días de la semana, complementado con invitaciones para congresos y conferencias en todo el mundo.
   
En el último capítulo de otro voluminoso libro, “Filosofía Política. Solidaridad, cooperación y democracia integral” (2009), advierte que “la humanidad enfrenta un monstruoso paquete de problemas globales, todos ellos sociales y, por ende, con un componente moral”.
   
Pero Bunge sostiene que “hay, sin embargo, una vía de salida posible: multiplicar el número de firmas cooperativas, reforzar la cooperación entre ellas y luchar para que la legislación las proteja”.

Por ello, demócrata convencido, confiaba en que “una sociedad más justa pueda emerger de la conjunción de las empresas cooperativas y el debate democrático”.

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nota de tapa

Los asociados de La Coope sumaron manos por los chicos

Una vez más, los consumidores y la Cooperativa Obrera estrecharon lazos para contribuir y alcanzar un nuevo récord en la campaña solidaria “Sumemos muchas manos por los chicos”, a beneficio de Unicef Argentina, que llegó a su 10° edición.

“Junto a Unicef Argentina nos habíamos planteado, durante el lanzamiento de esta nueva edición, el objetivo de alcanzar una recaudación que se aproximara al millón de pesos. Finalmente, gracias a 886.703 aportes solidarios de nuestros asociados y al compromiso de las cajeras y cajeros de las 134 sucursales de la Cooperativa Obrera logramos recaudar $1.209.201,57”.

De tal manera, Mónica Giambelluca, presidenta de la Cooperativa Obrera, reflejó el marcado éxito que alcanzó la 10° edición de la campaña solidaria “Sumemos muchas manos por los chicos”, a beneficio de Unicef Argentina, agrade-ciendo especialmente a los consumidores y colaboradores de La Coope que hicieron posible tamaño logro.

“Esta campaña en favor de los distintos programa que establece Unicef está instalada en nuestros asociados y va a seguir siendo un gran éxito con el transcurrir del tiempo, especialmente por el vínculo directo que establecen con los cajeros, en quienes depositan su confianza”, añadió Giambelluca.

Desde 1985, Unicef trabaja para garantizar el cumplimiento de los derechos de los niños, niñas y adolescentes en Argentina, promoviendo su bienestar.

En tal sentido, la organización realiza y apoya proyectos para promover educación, salud, inclusión, protección y participación para cada niño, niña y adolescente en nuestro país.

Artistas, deportistas, actores y músicos, entre otras personas reconocidas, que usan su talento y su exposición para promover la recaudación de fondos y abogar por los derechos de los niños son Embajadores de Buena Voluntad de Unicef a nivel mundial.

Uno de dichos embajadores para el ámbito nacional es, desde 1992, el actor y conductor de televisión Julián Weich, quien desde su exitosa carrera y a la par de su accionar solidario, se ha convertido hoy en uno de los referentes comunicacionales de Unicef Argentina.

“Es una sorpresa y una alegría el monto que se logró. Cuando la gente se propone un objetivo y sabe que hay un bien común, las cosas suceden”, destacó.

“Haber alcanzado semejante cifra no solo implica el compromiso de los cajeros de la Cooperativa Obrera sino también de los asociados, que a la hora de pagar su cuenta pensaron en los chicos, porque saben que a través de Unicef se pueden cambiar muchas realidades en nuestro país”, añadió.

Para Weich, “la Cooperativa Obrera en sí representa una manera de ayudar a la gente, y en este caso Unicef es el vehículo para hacer llegar esa ayuda a quienes lo necesitan y por eso la campaña funciona”.

“Es muy bueno que el vínculo entre Unicef y La Coope se mantenga, porque le permite al asociado vincularse, averiguar qué hacen las fundaciones con el dinero y cómo trabajan. Es un círculo virtuoso”, resaltó.

A su criterio, “todos aquellos que alguna vez recibieron ayuda en su vida saben también lo que es brindarla. Ayudar al otro es una manera linda de vivir y por eso esto nunca se termina. Cuando se entiende qué es ayudar y ponerse en el lugar del otro, la cosa no tiene vuelta atrás, porque lo querés seguir haciendo siempre”.

“Más allá de esta campaña es bueno que la gente se movilice y colabore con alguien. En forma particular, personal, familiar o a través de una institución. La primera ong es nuestro hogar, la segunda es el trabajo y la tercera es la que está lejos de casa. Si como sociedades estamos en alguna de estas tres instancias, entonces estamos haciendo las cosas bien”, sostuvo.

¿Qué es Unicef?

Creado en 1946, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef, por sus siglas en inglés) trabaja con énfasis en 190 países y territorios, procurando llegar a los niños más vulnerables y excluidos.

Las acciones de la organización se guían por la Convención sobre los Derechos del Niño, que reconoce como niño a todo individuo menor de 18 años y establece el marco fundamental a partir del cual los gobiernos que la suscriben deben desarrollar sus políticas para la niñez y la adolescencia.

Para llevar adelante su misión, brinda asistencia técnica y financiera a los países con fondos provenientes de los gobiernos que integran el Sistema de Naciones Unidas y otras donaciones.

Por otra parte, su accionar se centra en el mandato de promover la protección de los derechos del niño, ayudar a satisfacer sus necesidades básicas y aumentar las oportunidades que se les ofrecen para que alcancen plenamente sus potencialidades, atributos que contribuyeron a que Unicef recibiera en 1965 el Premio Nobel de la Paz.

El plan de trabajo de la entidad en la Argentina se inserta en el Marco Estratégico de Cooperación de las Naciones Unidas para el desarrollo, programa que se vincula con 9 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos como metas globales por la ONU.

Estos tienen que ver con la eliminación de la pobreza, la reducción del hambre, la salud y el bienestar, la educación de calidad, la igualdad de género, el trabajo decente, la reducción de las desigualdades, el fomento de la paz, la justicia y las instituciones sólidas, y las alianzas para lograr el conjunto de objetivos.

Derechos que no se cumplen

El propio Julián Weich hizo hincapié en que “para poder ser educados, los niños tienen que estar alimentados. Tenemos que trabajar para eso y Unicef lo hace, defendiendo los derechos que les corresponden”.

Al respecto, dijo que “hay un montón de derechos básicos que, desde hace mucho tiempo, no se cumplen en la Argentina, donde la mitad de los chicos son pobres y la mitad de los pobres son chicos. Parece mentira, pero hay muchos niños que todavía no tienen el DNI, algo básico y tan necesario que sin él no pueden, por ejemplo, ser atendidos en un hospital”.

“Los adultos y las empresas debemos ocuparnos de los ellos, a través de organizaciones como Unicef y de las tantas ong’s que hay diseminadas en nuestro país tratando de ayudarlos. Ser solidario es brindarle al otro lo que necesita, y para eso debemos conocer sus necesidades. La mejor manera de canalizar esa ayuda es a través de una institución, porque cuenta con las herramientas necesarias para hacerla llegar”, manifestó.

“Unicef trabaja desde muchos lugares para defenderlos con empresas como la Cooperativa Obrera, que genera confianza en sus asociados y establece el vínculo necesario como para concretar objetivos a largo plazo”, concluyó.

 

 

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testimonio

Natty Petrosino y su gran obra de amor

Reconocida no solo en nuestro país sino a nivel mundial, Natty Hollmann (o simplemente Natty Petrosino como expresa su apellido de casada) lleva más de 50 años al servicio de los más necesitados. Toda una vida dedicada al prójimo sin contar con bienes y sin haber conformado organización jurídica alguna.


“Era muy fácil vivir el Evangelio en el barrio Palihue: tenía la mucama, el jardinero que nos ayudaba con la gente y todo para dar. La providencia era fácil”, explica Natty Petrosino.

Sin embargo, después de la muerte clínica que tuvo a sus 27 años durante una cirugía por un cáncer de oído, su vida cambió por completo.

Lejos de las preocupaciones por mantener su bronceado de verano y tener quién lave los platos, empezó a recibir personas de la calle para atenderlas en su casa. Todo marchaba sobre rieles hasta que la situación no dio para más: su familia necesitaba espacio y muchos vecinos estaban descontentos con la continua llegada de indigentes.

Fue así como decidió dejar todo,  “como pide Jesús en el Evangelio”, subraya. Pasó entonces del barrio más acomodado de Bahía Blanca a una casa prestada de los ferrocarriles y con 10 personas que atender.

Natty recuerda que no tenían absolutamente nada. Por esa razón concurrió al diario de la ciudad para contar la situación y las donaciones comenzaron a llegar al día siguiente, aunque seguía faltando qué comer. Fue así que a la hora del almuerzo, una de las colaboradoras le preguntó qué hacer y ella le respondió: “Poné la olla, vamos a hacer arroz”.

Había solo un kilo, pero Natty insistió con que ponga la olla. En ese momento llegó un camión de la Cooperativa Obrera con 300 kilos de arroz. Para muchos fue casualidad; para ella, la mano de Dios.

“Los milagros que Él hace son así: el arroz llega porque alguien vibra en una frecuencia positiva, se suma y aparece; como la Cooperativa Obrera, que está conmigo hace 40 años y jamás me dejó de lado. Nunca le importó si la ayuda quedaba en Bahía o si iba a Goya (Corrientes), Formosa, el sur, Mendoza y nunca me pidieron una rendición. ¡Es una maravilla!”.

Sentada sobre un sillón y rodeada de numerosas macetas en la entrada de la vieja escuela abandonada que hoy la cobija cuando visita Bahía Blanca, hace un repaso de todos los lugares en los que trabajó desde que decidió entregarse por completo a Dios.

En Bahía, a la que cataloga como “ciudad bendecida” por su espíritu solidario, llegó a darles de comer a 7.000 personas entre chicos y grandes en las famosas ollas populares. Y después empezó a recorrer el país: pasó por el sur, por Mendoza, por Chaco, pero una de sus misiones más importantes fue y continúa siendo en Formosa, donde irrumpió en la vida de los pueblos originarios.

La pobreza extrema argentina

A paso lento y con una cruz colgando sobre su pecho, Natty atraviesa dos puertas y llega a un cuarto repleto de casetes y papeles. Se sienta, enciende el televisor y le pide a uno de sus colaboradores que ponga “el video de Timotea”.

La videocasetera tarda unos minutos en cargar el material y al fin se ve a Natty unas décadas atrás sentada junto a la mujer aborigen y uno de sus hijos. Timotea apenas mira a la cámara mientras amamanta a un pequeño. Y Natty, con el tono de voz dulce y pausado que aún mantiene, dice que no es necesario ir al sur de África para ver la pobreza más extrema, porque también la tenemos acá.

Termina la grabación y Natty, emocionada, reconoce que lo hecho en Formosa con los pueblos originarios no es obra suya.

“Me quedé del otro lado de ese ser que ustedes conocían cuando tuve la muerte clínica. Yo soy solamente un recipiente, un instrumento de Dios. ¿Y por qué me eligió a mí? Porque era lo peor, para que se den cuenta de que era obra de Él”.

Sacar piojos. Curar a leprosos y gente con sarna. Vivir en una carpa. Vacunar a personas y animales. Convivir con culturas muy diferentes y aceptar esas diferencias.

Lo que para muchos representa una utopía o algo imposible de lograr, para Natty es facilísimo. Para ella, la tarea más difícil la tiene el resto, que tiene que luchar por hacer las cosas bien en un mundo cada vez más complejo.

Dice que ella, en cambio, ya no pertenece a este mundo desde aquella experiencia en el quirófano. Se lanzó al vacío y al lanzarse ya no necesitó nada.

“Jesús te lo dice en el Evangelio: ‘Busca el reino de Dios y su justicia, y todo se te dará por añadidura’. Y la añadidura son los pobres, la gente que me critica, la gente que me ama, la gente que no entiende, todos. Tenés que vivir con esa añadidura y saber que todo te lo va a dar”.

A sus poco más de 80 años, Natty sigue manejando su camioneta y recorriendo el país. Pasa la mayor parte del tiempo en Formosa, donde levantó el barrio Bahía Blanca; pero también visita otros puntos remotos de la Argentina y ayuda a personas de las comunidades originarias que, por cuestiones de salud, tienen que viajar a Buenos Aires y no saben cómo hacerlo.

Sigue acompañada de su equipo de siempre, encabezado por Zulema, Silvina y Florencia, y algunos más que se suman en el camino.

A otro ritmo pero con constancia, Natty sigue yendo a los lugares más inhóspitos con las mismas ganas y con más experiencia. Entiende que se trata de ir y amar a la gente por sobre todas las cosas, aceptando las diferencias que puedan aparecer.

“No se trata de querer que quieran lo que vos querés, sino de ir despacio, haciéndolos sentir personas. Es una tarea que va más allá que darles de comer. Poder brindarles un mimo, una caricia, es muy reconfortante. Entonces, no importa que no logres éxitos desde lo terrenal, como que todos vayan a la escuela; importa que sean felices”.

 

 

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noticias

Rubén Alfredo Masón: "La Cooperativa está
atravesando una de sus etapas más fecundas"

Desarrollar una trayectoria centenaria que ha convertido a la Cooperativa Obrera en la principal organización de consumidores del país y con un importante reconocimiento nacional e internacional ha sido responsabilidad de dirigentes y empleados, cuya capacidad y esfuerzo no hubiera resultado suficiente sin el masivo respaldo de los consumidores.
Entre quienes contribuyeron al engrandecimiento de La Coope respetando los objetivos e ideales fijados por los fundadores y asumiéndolos como un verdadero compromiso está el contador Rubén Alfredo Masón (79), actual consultor institucional de la Cooperativa Obrera y la persona con más dilatada trayectoria en la entidad. Fundador en 1974 de “Familia Cooperativa”, revista de la cual fue su director durante 44 años.

-¿Cuándo se vinculó con la Cooperativa Obrera?
-En diciembre de 1961, pocas semanas después de recibirme de contador público y transitando los últimos días del servicio militar, los contadores Américo Malla y Francisco Muñiz, ex presidentes de la Cooperativa, me contactaron para ofrecerme el cargo de auditor externo, una función que merced a su iniciativa acababa de incorporarse al estatuto social. No dudé un instante en aceptar, ya que nací en una familia devota de La Coope, a la que desde muy chico mi madre me llevaba a hacer las compras. Comencé mi tarea profesional el 1º de febrero de 1962, desempeñándome como auditor-asesor durante más de 42 años y desde el 1º de noviembre de 2004 soy el consultor institucional. En resumen, he vivido muy de cerca casi seis de las diez décadas que se apresta a cumplir nuestra institución y hasta tuve la suerte de departir con varios de los visionarios que el 31 de octubre de 1920 decidieron crearla, canalizando la preocupación de los consumidores por el precio abusivo de un elemento entonces tan vital para la mesa familiar como era el pan.

-¿Cuáles fueron los acontecimientos más importantes que lo tuvieron como uno de sus principales protagonistas?
-Realmente fueron muchos, pero citaré los más trascendentes: la inauguración en 1965 del primer supermercado con autoservicio del sur argentino; el diseño de un ambicioso plan de desarrollo en 1974; la apertura del primer hipermercado bahiense en 1996 y dos años más tarde del shopping que es orgullo de la ciudad; la devolución a sus asociados en moneda de origen de las deudas que la Cooperativa tenía en dólares en 2002, pese a la pesificación de obligaciones dispuesta legalmente; el reconocimiento tributario de la naturaleza del acto cooperativo a partir de 2005 en la provincia de Buenos Aires. También mi actuación en la entidad me permitió fundar y presidir la Asociación Intercooperativa Regional y durante varias décadas conducir la Federación Argentina de Cooperativas de Consumo y representarla en el seno de la Confederación Cooperativa de la República Argentina. También mi vocación cooperativista me llevó a ser profesor titular de las dos cátedras obligatorias sobre Economía Social que se dictan en la Universidad Nacional del Sur y a dar conferencias, cursos y seminarios en el país y en el extranjero. Y en el plano estrictamente personal, fue en la Cooperativa Obrera donde conocí a Mabel, con quien llevamos 53 años de matrimonio.

-¿Por qué considera que la Cooperativa Obrera es una empresa exitosa?
-Porque sus dirigentes y funcionarios han demostrado a lo largo de toda su historia gran dosis de eficiencia, creatividad, innovación, adaptación y anticipación a los cambios, además de un enorme apego a los valores y principios de la doctrina cooperativista inspirada en las ideas de los Pioneros de Rochdale, fundadores de la célebre cooperativa de consumo inglesa. En este año de su centenario, la Cooperativa está atravesando una de las etapas más fecundas de su devenir histórico: su participación de mercado continúa creciendo mes a mes, sus resultados económicos están posibilitando devolver a cientos de miles de asociados muy interesantes retornos y su situación financiera luce más sólida que nunca.

-¿Cómo visualiza a La Coope en los próximos años?
-Seguramente su cadena de supermercados cooperativos seguirá expandiéndose geográficamente, para lo cual deberá estar siempre alerta evitando los peligros que puede implicar un superdesarrollo empresario. Y en lo institucional ese crecimiento hará necesario con el tiempo un esquema de regionalización que le permita llevar a cabo en cada territorio en los que preste sus servicios un accionar social y cultural similar al que en Bahía Blanca y otras ciudades le ha permitido convertirse en verdadero patrimonio de la comunidad.

Descuentos a beneficiarios de la tarjeta alimentar

Con la premisa de continuar brindando ayuda solidaria a las personas que más lo necesitan, la Cooperativa Obrera sumó su aporte a la política de complemento integral alimentario instrumentada por el gobierno nacional a través de la Tarjeta Alimentar, otorgando a los beneficiarios un 10 por ciento de descuento en la compra de una gran variedad de productos de la canasta familiar y un 15 por ciento en frutas y hortalizas.

Desde hace varios años la Cooperativa Obrera viene implementando esta política solidaria, por ende  ya se están aplicando a todaslas tarjetas sociales que recibe la entidad (Visa Alimentos, Visa Alimentar, Visa Anses, Mastercard Alimentaria, Cabal Incluir, Cabal 24 Anses, Plan Nacional de Seguridad Alimentaria, Confiable Alimentarias y Solidaria).

El descuento previsto para los citados artículos se instrumenta a medida que el gobierno vaya entregando las tarjetas en las distintas ciudades de toda la amplia región en la que La Coope cuenta con sucursales.

Los artículos comprendidos en el 10 por ciento de descuento que efectúa la Cooperativa Obrera son los siguientes:

Azúcar, arroz, bebidas sin alcohol, aceite, conservas (frutas, hortalizas y legumbres), harinas de maíz y trigo, alimentos para celíacos, galletitas dulces y saladas, leche, yogur, manteca, panificados, pastas secas y frescas, yerba, café, té, mate cocido y productos secos de almacén.

Asimismo, se instrumenta idéntico descuento en todos los alimentos y bebidas sin alcohol de las marcas propias Cooperativa, Ecoop, Sombra de Toro y Primer Precio.

Están excluidos de los descuentos los productos comprendidos en Precios Cuidados y en La Canasta de La Coope, así como tampoco aplican sobre carnes y pescados.

La Tarjeta Alimentar, que es entregada por el gobierno nacional por etapas en cada una de las provincias argentinas, está destinada a personas que cobran la Asignación Universal con hijas e hijos de hasta 6 años inclusive, embarazadas a partir de los 3 meses que cobren la Asignación por Embarazo para Protección Social y personas con discapacidad que perciban la Asignación Universal por Hijo, sin límite de edad.

La implementación de la tarjeta depende del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, dentro del marco del Plan Argentina contra el Hambre, apunta a representar un complemento integral alimentario y no suplanta a la Asignación Universal por Hijo ni a ninguna política existente.

El gobierno nacional la recarga el tercer viernes de cada mes y no sirve para extraer dinero en efectivo, ya que solo puede ser usada para la compra de alimentos de la canasta básica, excluyendo bebidas alcohólicas.

Nueva sucursal de La Coope en Chos Malal

El pasado 18 de marzo quedó inaugurada en Chos Malal la sucursal 132 de la Cooperativa Obrera, el segundo local que la entidad abre en pocos meses en la citada ciudad neuquina.

La nueva boca de expendio está ubicada en General Paz 365 y cuenta con una superficie de 608 metros cuadrados, con atención personalizada en las áreas de carnicería y hogar (línea blanca y colchones).

Cuenta con una dotación de 23 personas y estará abierta de lunes a viernes de 9 a 13 y de 17 a 21.30, y los sábados de 9 a 21.30, mientras que atenderá domingo por medio coordinando la actividad con la sucursal 131, inaugurada el 15 de noviembre del año pasado.

La apertura de las dos sucursales en Chos Malal permitió la continuidad laboral de 44 empleados que venían prestando servicios en el anterior supermercado, hecho que había sido destacado por el intendente municipal chosmalense Víctor Hugo Gutiérrez.

“La instalación de una empresa de la economía social significa crecimiento para la comunidad. La Cooperativa Obrera no sólo brinda alternativas desde lo económico sino también en el aspecto social, por lo que es sumamente positivo el hecho que una empresa diferente haya tomado la decisión de radicarse aquí”, sostuvo el jefe comunal.

Asambleas en 39 distritos

A partir del miércoles 1 de este mes comenzarán a celebrarse las asambleas que deben elegir a los 120 delegados titulares y otros tantos suplentes que participarán el sábado 27 de junio de la asamblea ordinaria de la Cooperativa Obrera.

El Consejo de Administración convocó a los asociados de la entidad a estas asambleas, cuyo detalle y condiciones pueden consultarse en los anuncios colocados en todos los supermercados y en las distintas oficinas administrativas de la entidad.

A continuación anticipamos el cronograma de las asambleas de distrito previstas para los meses de abril y mayo.

• Miércoles 1 de abril, a las 16: Azul y Villa Regina.
• Viernes 3 de abril, a las 15: Zapala.
• Martes 7 de abril, a las 16: Pedro Luro, Olavarría, Mar del Plata y Choele Choel.
• Miércoles 8 de abril, a las 16: Lobería y Necochea.
• Jueves 16 de abril, a las 16: Allen, Coronel Dorrego y General Roca.
• Viernes 17 de abril, a las 16: Coronel Pringles.
• Miércoles 22 de abril, a las 16: General Pico y Tornquist.
• Jueves 23 de abril, a las 16: Santa Rosa y Benito Juárez.
• Viernes 24 de abril, a las 14: Viedma. A las 16: Bolívar.
• Martes 28 de abril, a las 16: 9 de Julio.
• Jueves 30 de abril, a las 16: General La Madrid, Trenque Lauquen y Coronel Suárez.
• Jueves 7 de mayo, a las 16: Neuquén.
• Viernes 8 de mayo, a las 16:  Cutral Có y Guatraché.
• Sábado 9 de mayo, a las 15: Punta Alta.
• Jueves 14 de mayo, a las 16: Cipolletti y Plottier.
• Viernes 15 de mayo, a las 16: Tres Arroyos, Pehuajó y General Villegas.
• Jueves 21 de mayo, a las 16: Río Colorado, Pigüé y Laprida.
• Viernes 22 de mayo, las 15: Monte Hermoso. A las 16: General Acha y Cinco Saltos.
• Sábado 30 de mayo, a las 14: Bahía Blanca..

Intervención artística en Azul

En el marco de V Jornadas “Mujeres en Acción”, organizadas por la Asociación Empleados de Comercio del Azul para conmemorar el Día Internacional de la Mujer, la artista azuleña Laura Paterno realizó una intervención en la sucursal 20 de la Cooperativa Obrera que consistió en una pintura en vivo.

Sobre la obra, que es una ilustración basada en la canción Bird del grupo The Knife, la autora expersó que tiene como mensaje el hecho de que “no hay que perder la emoción de seguir volando siempre, aunque las cosas vayan mal. Si se pierde eso, se pierde todo”.

Cabe señalar que Laura Paterno es una artista que se mueve en diferentes planos de la creación como dibujo, pintura, maquillaje, vestuario, fotografía, realización de cortometrajes, animaciones, obras de teatro, entre otras.

El cuadro se expuso en el mencionado local de la Cooperativa Obrera, ubicado en avenida Piazza entre Constitución e Islas Malvinas y cuyo encargado es Carlos Hansen, donde se instaló una urna para que los consumidores depositaran sus cupones para participar del sorteo de la obra.

Círculo de Consumidores

Conforme los hechos de público y notorio conocimiento, las recomendaciones de organismos internacionales en referencia al Coronaviruis (COVID-19) y en el marco de las medidas preventivas emitidas por las autoridades del Ministerio de Salud de la Nación, la Cooperativa Obrera resolvió postergar el inicio de las reuniones previstas para este mes por el Círculo de Consumidores.

Dependiendo de la evolución de la problemática en el panorama local, regional y nacional, la entidad comunicará cómo y cuándo se efectuarán dichas actividades.

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